Writen by
habichuelacondulce.m@gmail.com
diciembre 19, 2014
-
0
Comments
Mayor General Piloto ® Carlos Rafael Altuna Tezanos |
Por Dario Mañon
El Mayor
General Piloto ® Carlos Rafael Altuna Tezanos, dijo estar sobresaltado al leer las
declaraciones del Ministro de Relaciones
Exteriores, Andrés Navarro, al pedirle a los dominicanos tener paciencia y tolerancia ante la
masiva presencia de haitianos en territorio nacional, y que permitan que el
Gobierno y el Estado enfrenten el problema.
El ex Jefe de la Fuerza Aérea de la
República Dominicana, en un amplio artículo publicado en la página Web del
Vicealmirante Luis Homero Lajara Solá, pregunta si aun con lo excesivamente
tolerante, pasivo, comprensivo, humanitario y solidario que ha sido el pueblo
Dominicana, ante la nación haitiana desde nuestra separación en 1844, debemos seguir tolerantes y haciendo
mutis, sin que la autoridad competente eleve una nota diplomática de protesta
ante la agresión de la sede diplomática o una explicación del cierre de la
frontera, Y en el peor de los hechos, sobre el secuestro y robo a ciudadanos
dominicanos.
Altuna Tezanos, señala que parecería que aceptamos cualquier tipo de
acontecimiento como bueno y válido, no importa que se lesione el interés
nacional.
El exjefe se refiere a las declaraciones del ministro de Relaciones Exteriores ofrecidas luego de participar, a principio de este mes, en el acto de apertura de un Foro Binacional celebrado en esta capital donde participaron las delegaciones de la Unión y Europea y el Sistema de las Naciones Unidas de Haití y República Dominicana, con la presencia de más de 80 delegados..
A continuación publicamos el articulo integro de Tezanos
¿Tolerancia? ¿Más de la que hemos tenido?
Carlos
Rafael Altuna Tezanos
Santo
Domingo
Con sobresalto leí unas declaraciones de
nuestro ministro de Relaciones Exteriores, quien luego del acto de apertura del
“Foro Binacional”, en el cual participaban 80 delegados de la Unión Europea y
Naciones Unidas, este, pidió a los dominicanos tener paciencia y tolerancia
ante la masiva presencia de haitianos en territorio nacional, y que permitan
que el Gobierno y el Estado enfrenten el problema.
Nuestras autoridades
nunca tramitan ni siquiera una nota diplomática ante las de Haití
Creo, sin temor a equivocarme, que el pueblo
dominicano ha sido excesivamente tolerante, pasivo, comprensivo, humanitario y
solidario ante la nación haitiana desde nuestra separación en 1844. Muy por el
contrario, ellos solo han golpeado nuestras buenas intenciones y receptividad
ante cualquier situación sociopolítica interna o de calamidades, realidad que
otros les niegan sin contemplación.
¿Tolerancia? Ante los cierres
inesperados de la frontera por parte de las autoridades haitianas, situación
que se ha convertido en una práctica habitual, sin ningún tipo de notificación de carácter diplomático a las autoridades
dominicanas.
¿Tolerancia? Ante las decisiones
adoptadas unilateralmente por las autoridades haitianas de vetar las compras de
nuestros productos agropecuarios, que a modo de recordatorio, aún mantienen su
prohibición sobre la comercialización de pollos y huevos de producción
nacional.
¿Tolerancia? Ante su incumplimiento a
los acuerdos arribados por la “Comisión Binacional de Alto Nivel”, cuyos
compromisos benefician a ambos estados, obligaciones que solo nosotros honramos
y cumplimos al pie de la letra.
A pesar de todos estos hechos, nuestras
autoridades de relaciones exteriores nunca se muestran dispuestas a tramitar ni
siquiera una nota diplomática de protesta ante las autoridades haitianas, como
está establecido en la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas, y muy
por el contrario, esta se percibe apática, como si preferiría actuar como una
especie de genuflexión ante el Estado vecino.
Y es que históricamente, el Estado, gobierno
y el pueblo dominicano, han cedido más de lo que deberíamos dentro del ámbito
de unas relaciones armoniosas y transparentes, orientadas hacia la República de
Haití, mientras que ellos nunca han sido mínimamente cordiales o han cumplidos
ni respetados las buenas intensiones y armoniosas relaciones brindadas por este
pueblo generoso, y mucho menos han sido tolerantes ante los buenos deseos de
los dominicanos.
En este contexto, vemos cómo el
embajador de la Unión Europea en el país, Alberto Navarro González, ha
expresado que el “Foro Binacional” propone una serie de acciones destinadas a
reforzar y apoyar el “Diálogo Binacional de Alto Nivel” existente entre Haití y
República Dominicana, porque creen que la estabilidad política ayuda al
desarrollo de los pueblos.
Al analizar sus palabras, sinceramente,
no sé a qué se refiere el señor Navarro, cuando dice que la “estabilidad
política” ayuda al desarrollo de los pueblos, pues a pesar de ser una
ineludible gran verdad, no se compadece con la situación sociopolítica
imperante en Haití, sobre todo cuando se vislumbra que sus autoridades no
quieren o han podido celebrar elecciones para elegir sus nuevos asambleístas.
El actual Congreso haitiano concluye sus
funciones el próximo 12 de enero, y a partir de esa fecha, su presidente tendrá
que gobernar por decreto, hecho que tiene implicaciones institucionales debido
a que esa nación posee un sistema de gobierno tipo “parlamentario”, quedando
una especie de vacío de poder.
Se dirá que debemos ser más tolerantes,
para que nuestra estabilidad política ayude al desarrollo de Haití o de la isla
como un todo, sí es eso, lo que quiere decir el Representante de la Unión
Europea en nuestro país.
Mientras, que en el otro lado de la isla
secuestran a choferes dominicanos, atacan a nuestro consulado en Juana Méndez y
nuevamente se suspende sin explicación el mercado bilateral de Dajabón.
Aunque los transportistas dominicanos
fueron liberados, sus mercancías fueron saqueadas por turbas que atacaron sus
camiones, ocasionando pérdidas millonarias.
Aún así, ¿debemos seguir tolerantes y
haciendo mutis, sin que la autoridad competente eleve una nota diplomática de
protesta ante la agresión de la sede diplomática o una explicación del cierre
de la frontera? Y en el peor de los hechos, sobre el secuestro y robo a
ciudadanos dominicanos, pues parecería que aceptamos cualquier tipo de
acontecimiento como bueno y válido, no importa que se lesione el interés
nacional.
Imaginémonos que todos estos hechos
hubiesen ocurrido a la inversa, les aseguro, que la reacción de las autoridades
haitianas no sería de indiferencia, ni mucho menos de tolerancia ante tales
desmanes y agresiones a sus nacionales.
Es palpable que la inestabilidad sociopolítica nuevamente aflora su
cabeza en Haití, ahora pidiendo la renuncia de su Presidente y que se convoque
a elecciones, este eterno ciclo de agitación- caos-violencia exhibe un
escenario interno de inseguridad. Situación, que evidentemente tiene sus
repercusiones negativas en nuestro país, y es obligatorio que se tomen todas
las medidas de precaución necesarias para neutralizar sus efectos, de manera
que se establezca un control eficaz de la frontera para detener la desenfrenada
entrada de inmigrantes ilegales haitianos hacia nuestro territorio, esto a
pesar, de que los dominicanos seguimos siendo tolerantes y apaciblespublicada 18/12/14
No hay comentarios
Publicar un comentario